jueves, 25 de noviembre de 2010

Los peligros del mal periodismo

BUENO CHE, A PONERNOS SERIOS...



Una de las deudas pendientes de esta sociedad es que los que se dedican a la difusión de noticias, léase los periodistas, tanto desde TV como desde los diarios, den información veraz. No siempre hemos de confiar en que el público sepa discernir cuándo lo que dicen es verdadero o falso, sino que es el mismo medio de comunicación el que debe comprobarlo. Ya que pretenden que los tomemos en serio, también deberían ser serios a la hora de filtrar lo que es cierto, veraz y probable de lo que no es más que una falsa creencia, una noticia no verificada, un engaño o, hablando en plata, una magufada. Empezando por los horóscopos. Pero estoy pensando en un artículo publicado en el diario La Vanguardia titulado La ciencia debe avanzar para entender los fenómenos paranormales. Que sí, hombre, que sí, que la ciencia debe avanzar hacia lo paranormal. Y ya puestos, quedarnos en el año 1618, que es donde empieza nuestra historia de hoy.
En aquel entonces, a un famoso médico londinense llamado Robert Fludd se le ocurrió una idea. Sabía que los agricultores tenían que llevar el grano a molinos distantes para moler le grano y luego cargar la harina de vuelta a casa. Los molinos aprovechaban una corriente de agua para hacer girar una rueda que era la que molía el grano. Así que se preguntó si no podría hallar un modo de hacer funcionar un molino sin tener que depender de una corriente de agua. La idea era que si podía conseguir que la rueda hidráulica, además de moler el grano, pudiera accionar una bomba para volver a llevar el agua arriba. De ese modo, razonaba, el molino se movería indefinidamente.
Pues bien, como ya habréis sospechado, Fludd fracasó. El concepto de energía o trabajo como cantidad mensurable no aparecería hasta el siglo XVII. Y faltarían otros 200 años para que el defecto de la máquina de Fludd se expresara en una ley fundamental de la Naturaleza: la energía se conserva o Primera Ley de la Termodinámica o el Principio de Conservación de la Energía que, básicamente, nos dice que no se puede conseguir algo a cambio de nada.
No obstante, desde aquella época y durante los 400 años transcurridos desde entonces, cientos de inventores de todo el mundo han intentado vencer a la susodicha Primera Ley de la Termodinámica. En 1911 el comisario de patentes de EEUU estaba tan molesto por el hecho de que la Oficina de Patentes dedicara tanto tiempo a ideas imposibles que dispuso que no se aceptara ninguna solicitud de máquina del movimiento perpetuo hasta que no se hubiera transcurrido un año después de que se depositara un modelo de la máquina real y en funcionamiento en dicha oficina. Así, pareció ponerse fin a las solicitudes de patentes de movimiento perpetuo.
Supongo que habréis pensado que a partir de aquella fecha a nadie se le ocurriría intentar patentar un invento que intentara ir en contra de la ley de la conservación de la Energía, ¿no? Si es así, despreciáis la estupidez humana. Y no estoy hablando de hace uno o dos siglos, sino de la década de los 1980. Me refiero a Joseph Newman. Quería patentar un mecanismo que, según afirmaba, podría dar un movimiento perpetuo. Evidentemente, rechazaron la patente. Pero Newman no se quedó atrás y llevó el caso a los tribunales. El juez Thomas Penfield Jackson, del Tribunal del Distrito de Columbia, reconociendo sus limitaciones técnicas, remitió el asunto a un experto en la materia, un ingeniero electrónico y excomisario de patentes llamado William E. Schuyler Jr. En un informe entregado en septiembre de 1984 concluía increíblemente que las evidencias demostraban de manera abrumadora que la salida de la máquina energética de Newman era mayor que la energía de entrada.
Aun así, el juez Jackson no quedó convencido. Fiándose de su propio sentido común se puso a estudiar algo de física. Ocho meses después afirmó que el informe de Schuyler estaba claramente equivocado. Para respaldar su postura apeló a las leyes de la Termodinámica y a un informe de la Universidad Pública de Mississipí. Armado con estas evidencias desestimó el informe de Schuyler y ordenó a Newman que entregara su máquina energética a la Oficina Nacional de Normalización (NBS), probablemente el laboratorio más fidedigno de todo el país, para que la sometieran a prueba.
Varios miembros del Congreso se mostraron aparentemente de acuerdo, pero el diputado Bob Livingston (senador republicano por Luisiana), puso en circulación un informe de que aquello era un abuso de poder, concluyendo que Newman había sido objeto de un tratamiento injusto y arbitrario. En 1986, el mismo Newman se opuso ferozmente a la orden judicial que le obligaba a entregar su máquina energética a la NBS y trató de obstruir la realización de la prueba. Los físicos de la NBS le sugirieron que conectara la salida a la entrada de su propia máquina, pues si realmente funcionara, sería capaz de trabajar sin necesidad de fuente de energía.
Durante la audiencia en el Senado, Newman desafió a cualquier doctor en física que quisiera debatir con él. Los que habían allí no eran científicos, salvo uno de ellos: John Glenn, entonces senador por Ohio, antiguo astronauta y un auténtico héroe americano. Su voz era tranquila, la propia del piloto de pruebas y del astronauta, controlando siempre sus emociones. Admitió que no era doctor en física, pero que probablemente tenía los conocimientos técnicos necesarios para el debate.
- Se trata de un problema bastante sencillo. Se mide la energía de entrada y de salida, y se mira cuál de las dos es mayor ¿Estaría el señor Newman de acuerdo con esto? Si lo está, ¿qué laboratorio le gustaría que hiciera las mediciones?
Fue la primera vez que Newman se quedó sin habla. Le había puesto en un aprieto. Finalmente, Newman afirmó que se oponía a cualquier prueba realizada por cualquier laboratorio, dado que ello constituiría una afrenta a los científicos que ya habían respaldado su máquina.
Un miembro del comité le pasó una nota al senador Glenn. Echó un vistazo a la nota y, a continuación, formuló otra pregunta a Newman:
- ¿Conocía Newman a Schuyler con anterioridad al juicio?
La sala quedó en silencio. ¿Qué había detrás de la pregunta de Glenn?
El informe de Schuyler, el ingeniero que había visto viable la máquina de Newman, constituía el aspecto más problemático de todo aquel asunto. Si existía algún vínculo entre Newman y Schuyler echaría por tierra el argumento de que el juez Jackson le había tratado injustamente.
- ¿No es cierto -presionó Glenn- que en una ocasión la empresa de patentes de Schuyler representó a Newman?
- Sí, pero el señor Schuyler no me conocía personalmente.
Por la sala se escuchó una especie de suspiro colectivo. Newman quiso defenderse:
- Ya veo a dónde quiere ir a parar, senador. No tengo nada que ocultar. Míreme a los ojos, y verá que no pestañeo.
- Tampoco yo pestañeo -respondió Glenn con voz tranquila.
Resulta que un avispado miembro del personal del Senado, revisando una montaña de documentos relacionados con el caso Newman, había descubierto en nombre de Schuyler en el membrete de la carta de una empresa de patentes que había representado a Newman en un invento anterior. La gente empezó a abandonar la sala. Finalmente, no se patentó la máquina de Newman.
La gran ironía es que no había sido la Primera Ley de la Termodinámica la que derribó la máquina de Newman, sino la pericia de un hábil senador que había sido astronauta. Por supuesto, Newman siguió afirmando que su máquina funcionaba y que todo era una conspiración en contra de su idea.
La línea entre la locura y el fraude es muy delgada y difusa, y no siempre es fácil saber cuándo se cruza.
¿Y qué relación tiene todo esto con el mal periodismo? Pues que no hará muchos años hubo una conferencia en la cual se analizaba, entre otras cosas, los medios de comunicación como transmisores de la información científica. Uno de los conferenciantes relató la noticia difundida por un programa de TV en el que se presentaba a alguien que afirmaba haber obtenido lo mismo que Newman: un aparato que obtenía energía de la nada. Se hablaba de que el programa se divulgó sin ninguna explicación, sin nadie que hiciera un esfuerzo para señalar que la existencia de dicho dispositivo era, sencillamente, imposible.
Un periodista de entre el público encontró el asunto divertido y pensando que se estaba haciendo una montaña de un grano de arena dijo:
- Y bien, ¿qué daño hace? Los periodistas simplemente informan sobre lo que alguien dice haber hecho y, si no es verdad, ¿qué? ¡Nadie sale perjudicado!
Sucede que justo detrás de él estaba Isaac Asimov, quien se inclinó hacia delante y le dijo:
¿Realmente no ve el daño que produce? El mundo se encuentra actualmente sumergido en una crisis energética. La disponibilidad de la energía está disminuyendo año tras año, su precio aumenta año tras año y, como resultado de todo ello, las bases de la civilización se van debilitando año tras año. Si la civilización quiere sobrevivir, la humanidad deberá tomas resoluciones difíciles y adoptar medidas energéticas lo antes posible. No podemos continuar desperdiciando energía. Debemos desarrollar fuentes alternativas. No podemos seguir mostrándonos tan descuidados con el problema.
Entonces, algún periodista cuenta a diez millones de personas que alguien afirma que la energía puede ser obtenida de la nada. Deja al público con la impresión de que, dado que podemos obtener energía de la nada, no hay crisis energética y que, por lo tanto, no debe tomarse ninguna decisión difícil ni adoptarse ninguna medida energética. Esto podría simplemente crear la cantidad necesaria de imprudencia como para impedir que la humanidad resuelva este problema de vida o muerte. Por lo tanto, hará que la civilización se derrumbe. ¡Y usted pregunta qué daño podrá hacer!
Y en palabras del mismo maestro Asimov:
¿Existe algún crimen mayor que el de instruir de forma deliberada y errónea al público acerca de la ciencia, el de engañarlo deliberadamente, el de defraudarlo y el de alimentar y estimular su ignorancia?
Fuentes:
“Ciencia o vudú”, Robert L. Park
“Fraudes paranormales”, James Randi
http://barcomasgrande.blogspot.com/2009/06/y-sin-embargo-no-se-mueve-2.html



 Fuente:

http://www.historiasdelaciencia.com 

---> El blog de Omalaled, se los recomiendo es una masa!

domingo, 21 de noviembre de 2010

Movimiento Onírico En La Vigilia

Salen de las alcantarillas. Son sapos veloces que van limpiando la ciudad a su paso, y digo limpiando porque en la punta de sus patitas tienen microscópicos pelos que, a modo de una escoba, se llevan toda la mugre.
Unos parlantes anuncian con histeria que se viene el fin del mundo. Los aviones se estrellan por doquier y su magia es la luz que provocan. La gente anonadada observa los sucesos.
Algunos acampan. Otros no.

Por fin se asoma el sol. Fin de la noche...
Sedientos de sangre, los mosquitos salen a la caza de algún humano jugoso. Olfatean a lo lejos, y eligen a su victima, cuya reacción es "auch!"
Como todos saben, el sol tiene rayos UVA, UVB y UVC. Estos últimos dan miedo a los sapos, es algo psicológico. Sin pensarlo dos veces retornan a las alcantarillas, pero con una diferencia:

Sus excrementos vuelven a ensuciar las calles de Buenos Aires 




Buenas noches.


Colorau

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Fantasía


















Importante: no quiero ofender a nadie, me parece que con la nota que salio en Clarin.com y en el diario, la imagen de esta persona queda igualmente expuesta que con este dibujo.
Repito: NO HAY OFENSA. De ser necesario este post sera borrado.

Colorau

lunes, 15 de noviembre de 2010

Fantasía

Asesinan a golpes y puñaladas a una argentina que vivía en España

15/11/10 La mujer residía en Valencia desde hace cinco años, donde trabajaba legalmente.

VICTIMA. CRISTINA TENIA 57 AÑOS Y TRES HIJOS. UNO VIVIA CON ELLA EN ESPAÑA.


Cristina Menna, una ciudadana argentina de 57 años, fue encontrada degollada el viernes pasado en un canal de acceso al lago de L’Albufera, en la zona del puerto de Catarroja, Valencia. El cadáver presentaba más de veinte puñaladas y tenía el cuello totalmente seccionado. Además, presentaba una serie de golpes por todo el cuerpo. Después de una rápida investigación, la guardia civil detuvo a José Pascual, 45 años, quien confesó ser culpable del crimen .
Pascual estaba bajo tratamiento psiquiátrico y de licencia en su trabajo en el Ayuntamiento de Paiporta, donde vive. Los médicos informaron que tenía varios intentos de suicidio . Salía desde hace dos meses y medio con Cristina, que lleva poco más de cinco años radicada, junto a un hijo de 20 años, en la cercana localidad de Massanassa. Cristina y José, no vivían juntos.
A última hora del viernes pasado, los familiares de la víctima, presentaron una denuncia ante la Guardia Civil de Catarroja. Los guardias asociaron la denuncia de los familiares con otra que se había producido horas antes por unos pescadores que habían encontrado un cadáver en un canal entre arrozales.
No olvidaré esa imagen nunca ”, explicó conmovido el pescador Antonio Salvador, que salió el viernes a las 15,30 a faenar en L’Albufera desde el puerto de Catarroja junto a otros tres compañeros. Cuando volvían hacia el puerto, pasadas las cinco de la tarde “un compañero me dijo que en el agua había algo. Un muerto, me precisó. Yo pensaba que era un muñeco. Decidimos parar la barca y acercarnos a tierra firme”, recordó.
“Nos acercamos y el estómago me dio un vuelco cuando vimos que era un cadáver.
Era una mujer con el pelo teñido de rubio que estaba flotando en el borde del canal con medio cuerpo afuera . Tenía las manos levantadas, cerca de la cara. Llevaba puesto un reloj. Recuerdo que tenía los ojos abiertos”, contó Antonio Salvador.
El Grupo de Rescate Subacuático de la Guardia Civil acudió al lugar donde se encontraba el cadáver de Cristina, conocido como Casa del Alfafarec. La Guardia Civil y la policía local lo primero que hicieron fue acordonar la zona y cortar el camino para evitar que los pescadores y cazadores que pasan por esta ruta contaminaran más la escena del crimen.
El cuerpo fue recogido por una dotación de bomberos y el juzgado de instrucción de Catarroja ordenó su traslado al Instituto de Medicina Legal. Los buzos se dedicaron a rastrear la zona del canal mientras otros policías lo hacían en tierra firme. Los guardias interrogaron a familiares y vecinos y el sábado por la mañana acudieron a la casa de los padres de José Pascual, quién vivía con ellos.
Una vez detenido, fue trasladado a los calabozos, donde confesó el asesinato de Cristina. Admitió que golpeó y apuñaló ferozmente a la mujer y que después la llevó en su auto hasta la zona donde se encontró el cadáver. Allí la arrojó a uno de los canales.
Este es el crimen de género número 61 en lo que va de este año en España y el sexto en la Comunidad Valenciana .


Fuente: clarin.com

sábado, 13 de noviembre de 2010

Se viene.......

Tengo compu nuevaaaaa y monitor...

y con la compu , un nuevo paint

asi que preparense para una nueva Generación de dibujos de Paint (?)

Colorau

jueves, 4 de noviembre de 2010

Berenjena

Buen día, buenas tardes, buenas noches si es de noche
Total no cuesta nada, es solo un deseo y no cuesta
Decirlo nomás.


Colorau